El Servicio de Administración Tributaria (SAT) implementó un cargo adicional a los cuentahabientes que realicen depósitos en efectivo por encima de los límites permitidos, con el fin de fortalecer el control fiscal y prevenir irregularidades financieras.
La medida busca promover la transparencia en el manejo del dinero y garantizar el cumplimiento de las obligaciones tributarias.
De acuerdo con el comunicado oficial, los contribuyentes que superen los topes de depósitos establecidos deberán cubrir un impuesto adicional, el cual se aplicará de forma automática a través de las instituciones bancarias.
El SAT explicó que el objetivo de este nuevo control no es sancionar a los usuarios, sino fomentar la rendición de cuentas y evitar operaciones no declaradas que puedan estar vinculadas con evasión fiscal o lavado de dinero.
“El límite de depósitos en efectivo está directamente relacionado con la transparencia fiscal y con la necesidad de garantizar que todos los contribuyentes declaren de manera correcta sus ingresos ante el fisco”, señala la autoridad tributaria en su aviso.
En este sentido, el organismo recordó que el marco legal aplicable proviene de la Ley del Impuesto sobre la Renta (ISR), la cual faculta al SAT a supervisar los movimientos financieros de las personas físicas y morales para detectar posibles inconsistencias.
El tope máximo establecido es de 15 mil pesos mensuales en depósitos en efectivo. Superar esta cantidad implicará el pago de un recargo equivalente al 3% sobre el monto excedente.
Por ejemplo, si un cuentahabiente deposita 26 mil pesos en efectivo durante un mes, el monto que excede el límite permitido asciende a 11 mil pesos. En ese caso, el impuesto aplicable sería de 330 pesos adicionales.
El SAT aclaró que esta medida no afecta las transferencias electrónicas, como las realizadas a través de SPEI o TEF, ya que estos movimientos son completamente rastreables y cuentan con registros automáticos de origen y destino.
Las instituciones financieras están obligadas a reportar al SAT todos los movimientos inusuales o recurrentes que superen los 15 mil pesos, con el propósito de identificar operaciones que puedan considerarse sospechosas.
Además, el organismo recaudador podrá requerir información adicional sobre el origen del dinero depositado, especialmente en casos donde los montos no coincidan con los ingresos declarados por el contribuyente.
El uso de efectivo sigue siendo un punto sensible para la autoridad fiscal, debido a que es uno de los principales canales por los cuales pueden circular recursos no declarados.
El SAT advirtió que no respetar los límites establecidos o evadir la declaración de ingresos provenientes de depósitos en efectivo puede derivar en multas económicas y auditorías fiscales.
Los recargos aplicables pueden incrementarse si se determina que hubo intención de ocultar información o falsear declaraciones. Por ello, el organismo exhortó a los ciudadanos a mantener sus cuentas en orden y declarar todos los ingresos recibidos.
Para evitar sanciones, el SAT recomienda:
- No realizar depósitos en efectivo que superen los 15,000 pesos mensuales.
- Utilizar medios electrónicos de pago —como transferencias SPEI o TEF— para operaciones de mayor monto.
- Conservar comprobantes y justificantes de origen del dinero depositado.
- Verificar los movimientos en los estados de cuenta y reportar inconsistencias.



