
En la cocina, el aceite es un ingrediente básico, pero elegir la mejor opción puede ser un reto. La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) analizó las marcas más populares, evaluando su calidad, composición y estabilidad al calor, para ayudarte a tomar la mejor decisión.
El aceite de maíz Mazola es una excelente opción si buscas un aceite estable a altas temperaturas, lo que lo hace perfecto para freír. Su resistencia al calor minimiza la degradación de sus propiedades, manteniendo la calidad de tus alimentos. Además, es rico en antioxidantes, lo que aporta un beneficio extra a tu salud.
El aceite de soya Nutrioli fue calificado positivamente por su perfil de ácidos grasos y su bajo contenido de grasas saturadas. Este aceite se convierte en una opción saludable para el uso diario. Es versátil y su estabilidad lo hace adecuado para diversas técnicas de cocción, incluyendo la fritura.
El aceite 1-2-3 es una de las marcas más populares y no es casualidad. Este aceite destaca por su excelente relación calidad-precio. Con un bajo contenido de grasas saturadas y una buena resistencia al calor, es una opción confiable y accesible para el hogar, que te permite cocinar sin preocupaciones.
El aceite de canola Cristal es ideal si buscas reducir las grasas saturadas. Su alto contenido de ácidos grasos omega-3 y omega-6 lo convierte en una alternativa saludable. Es una opción que cuida tu bolsillo y es ideal para guisar y freír a temperaturas moderadas.
El aceite de canola Canoil se posicionó como una alternativa de alta calidad a un precio más accesible. Su bajo contenido de grasas saturadas y su buen rendimiento a altas temperaturas lo hacen una excelente opción si buscas una alternativa económica sin sacrificar la calidad.
Las marcas propias de supermercados como Chedraui y Precissimo han demostrado que no es necesario gastar mucho para obtener un buen producto. Estos aceites ofrecen una calidad aceptable a un precio muy competitivo. La Profeco recomienda revisarlos para cuidar tu economía sin descuidar la salud.