REPORTERO1 
El regidor de Morena, Hugo Eduardo González Muñiz, emitió un contundente posicionamiento ante el informe presentado por el presidente municipal de Chihuahua, Marco Bonilla, señalando la falta de avances tangibles en obra pública y cuestionando la efectividad de la actual administración en la atención de los principales retos urbanos.
Durante su análisis, González destacó la inconformidad creciente entre la población local, quien asegura seguir enfrentando deficiencias en servicios públicos como el acceso al agua potable, la recolección de residuos, el mantenimiento de calles y luminarias, así como el rezago en infraestructura urbana. Afirmó que, pese a las reiteradas demandas ciudadanas, la planeación del crecimiento urbano se mantiene insuficiente y alejada de las necesidades reales de la ciudad.
El regidor fue enfático al señalar la ausencia de proyectos “insignia” capaces de responder a las prioridades de la comunidad. “No se ha colocado ni la primera piedra de ninguna obra”, recalcó González, subrayando que durante todo el año no se han iniciado obras públicas relevantes en el municipio, lo que genera una creciente preocupación entre los habitantes que esperaban mejoras palpables en su entorno.
González recordó que hace un año, la administración municipal solicitó un crédito de 570 millones de pesos con la promesa de detonar proyectos de infraestructura esencial. Sin embargo, hasta la fecha, ninguna de las obras anunciadas ha iniciado, lo que para el regidor representa un grave incumplimiento de compromisos y expectativas.
Criticó también que, a cuatro años de gobierno, los informes municipales sigan presentando los mismos proyectos, como el polideportivo y el alumbrado público LED, que figuraron ya en el informe de 2022, sin que se propongan obras nuevas que respondan a las actuales necesidades de la ciudad. Para González, esta “inercia administrativa” es evidencia de un estancamiento municipal, sin avances tangibles que respalden el uso de recursos públicos.
En materia de seguridad, el edil de Morena enfatizó que la violencia y delincuencia siguen impactando a las familias chihuahuenses, a pesar de las cifras y estrategias presentadas por la administración. González aseguró que la percepción ciudadana apunta a una insuficiencia de patrullajes y programas de prevención, recursos que, según dijo, no llegan a quienes más los requieren.
Aunado a lo anterior, denunció la falta de inversión en la pintura de pasos peatonales y la renovación de la señalética vehicular y peatonal, una omisión que, dijo, expone a la población a riesgos evitables, especialmente en cruces escolares, zonas comerciales y avenidas de alta circulación.
El regidor también criticó el desempeño de la Dirección de Desarrollo Urbano, a la que acusó de opacidad y limitada capacidad para generar confianza sobre la autorización de nuevos fraccionamientos. Subrayó que la ausencia de información clara acerca de los criterios y procesos de aprobación, así como la falta de vigilancia sobre el impacto ambiental y urbano, han provocado inquietud y descontento social.
En este sentido, González insistió en la urgencia de priorizar la protección de los cerros que rodean la ciudad y avanzar hacia su declaratoria como área natural protegida, antes de que el crecimiento urbano desmedido comprometa irreversiblemente el patrimonio ecológico y paisajístico de Chihuahua.
Finalmente, González Muñiz señaló que el informe presentado por el alcalde Bonilla proyecta una imagen de Chihuahua distante de la experiencia cotidiana de miles de personas. Mientras el discurso oficial presume avances y logros, dijo, la realidad diaria está marcada por baches interminables, calles sin pavimentar y una infraestructura urbana deteriorada y sin atención.
“La ciudadanía merece hechos, no solo promesas. Es indispensable que la administración municipal escuche y responda a las necesidades reales de quienes habitan en Chihuahua”, concluyó el regidor morenista.
