
Simon Mills, referente internacional en medicina herbal, alertó sobre los riesgos derivados del uso excesivo de antibióticos y fármacos convencionales como omeprazol.
Las declaraciones y reflexiones del especialista se dieron en el podcast The Diary Of A CEO, donde compartió su perspectiva sobre los desafíos actuales para la salud global.
Con casi cinco décadas de experiencia clínica y reconocimiento en la British Herbal Medicine Association y la European Scientific Cooperative on Phytotherapy, Mills sostiene que la resistencia a los antimicrobianos es una amenaza creciente. Además, destaca la existencia de alternativas naturales, capaces de complementar o, en ciertos casos, sustituir los tratamientos farmacológicos tradicionales.
Durante su trayectoria, Mills integró el conocimiento ancestral de plantas medicinales con los estándares científicos modernos, liderando proyectos europeos y atendiendo a miles de pacientes en Exeter. Según el especialista, el paso de sociedades rurales a urbanas implicó una pérdida de saberes tradicionales sobre el uso de plantas.
Mientras en regiones fuera del mundo anglosajón la fitoterapia sigue siendo frecuente, en países como Reino Unido y Estados Unidos predomina la prescripción de fármacos como omeprazol, los medicamentos más prescritos para tratar el reflujo ácido, y antibióticos.
Respecto a los antibióticos, el experto advierte que el abuso acelera la aparición de bacterias resistentes, un fenómeno que la Organización Mundial de la Salud (OMS) identifica como una de las principales amenazas mundiales. En 2019, la resistencia a los antimicrobianos provocó 1,27 millones de muertes y contribuyó a casi cinco millones más, cifras que, según Mills, continúan en aumento.
Los fármacos convencionales afectan también al microbioma intestinal, compuesto por billones de microorganismos que superan en número a las células humanas. “El microbioma dirige la orquesta de nuestra salud. Los antibióticos y otros medicamentos pueden diezmar su diversidad, debilitando nuestras defensas”, explicó Mills en su participación en The Diary Of A CEO.
Ante este panorama, Mills recomienda alternativas naturales amparadas tanto por la tradición como por la investigación científica. Entre los productos herbarios más valorados por el especialista se encuentra el ajo, denominado “penicilina rusa” por su efecto antimicrobiano y prebiótico sobre la flora intestinal; el jengibre y la canela, recomendados para molestias que responden al calor, como resfriados, dolores articulares o menstruales; y la cúrcuma, cuyo principio activo influye sobre la inflamación a través del microbioma.
Además, también menciona el cardamomo, la menta y amargos como la radicheta o el diente de león, útiles para la digestión y la fiebre, junto con el chocolate negro y el té verde, ambos ricos en polifenoles favorables para el sistema cardiovascular y el cerebro.
El autocuidado y la prevención ocupan un lugar central en la visión de Mills. Recomienda una dieta basada en la diversidad vegetal, con al menos 30 tipos de plantas diferentes por semana, y la práctica de “comer el arcoíris”, es decir, incorporar alimentos de todos los colores para aprovechar la variedad de polifenoles y nutrientes.
Resalta además que los productos orgánicos o recolectados en la naturaleza pueden ofrecer mayores concentraciones de compuestos beneficiosos, ya que las plantas deben defenderse de forma natural frente a plagas y condiciones adversas.
Mills remarca que la fitoterapia debe entenderse como un complemento en el manejo de enfermedades crónicas y la prevención, no como reemplazo de la medicina convencional. “No se trata de rechazar los medicamentos, sino de usarlos con criterio y explorar otras vías que fortalezcan nuestra salud desde la raíz”, añadió.
También subraya la individualidad en la respuesta a los tratamientos: “Cada persona es diferente. Lo que funciona para uno puede no ser adecuado para otro. La clave está en escuchar al cuerpo y ajustar el enfoque”.
En un contexto de desafíos sanitarios crecientes y cambios persistentes, Mills concluye, en entrevista con The Diary Of A CEO, que la verdadera fortaleza radica en recuperar la conexión con la naturaleza y construir relaciones de apoyo mutuo.
Según el especialista, esta relación es la base sobre la que es posible enfrentar el entorno y las amenazas de forma más resiliente y con mayor bienestar.