
Un ataque combinado de drones y misiles rusos golpeó la capital ucraniana durante la noche del domingo al lunes, matando al menos a cinco personas e hiriendo a varias otras según los servicios de emergencia ucranianos. Los equipos de rescate continúan sus operaciones de búsqueda en los escombros de un edificio de apartamentos parcialmente colapsado en el distrito de Shevchenkivskyi, esperando encontrar posibles supervivientes.
Este nuevo ataque mortal ocurre menos de una semana después del ataque del martes anterior que mató a 28 personas en Kyiv, que el presidente Zelensky había calificado como “uno de los mayores bombardeos de esta guerra que ahora está en su cuarto año.”
El trágico balance de los ataques rusos masivos sobre la capital ucraniana durante la noche del lunes al martes ha aumentado a 28 muertos, según las autoridades locales el miércoles.
Este ataque, calificado por el presidente Volodymyr Zelensky como “uno de los peores” desde la invasión de febrero de 2022, afectó particularmente a un edificio residencial de nueve pisos donde perecieron 23 personas. Más de 440 drones y 32 misiles apuntaron a 27 sitios en la capital, causando también más de 130 heridos. Paralelamente, Moscú reivindica ganancias territoriales en la región de Sumy donde sus fuerzas establecen una “zona de amortiguamiento”.
Ucrania anunció el lunes que recibió 1.245 cuerpos adicionales de personas muertas durante el conflicto de Rusia, llevando el número total de restos repatriados a más de 6.000 desde la semana pasada.
Este intercambio es parte de un acuerdo alcanzado entre las partes beligerantes en Estambul a principios de junio, marcando «la etapa final de la repatriación de cuerpos» según el ministro de Defensa ucraniano Rustem Umerov. Moscú afirma por su parte haber entregado 6.060 cuerpos en total y recibido 78 restos a cambio, mientras se declara listo para entregar 2.239 cuerpos adicionales de personal militar caído.
Nuevos ataques nocturnos rusos de magnitud considerable golpearon Ucrania en la noche del lunes al martes, matando a tres personas e hiriendo a varias en Kyiv y Odessa. Rusia lanzó 315 drones explosivos y 7 misiles contra varias regiones ucranianas, de los cuales 213 drones fueron interceptados por la defensa aérea. Estos ataques ocurren mientras las negociaciones de paz directas entre Moscú y Kyiv, iniciadas en mayo en Estambul, están en un punto muerto total, y el presidente Volodymyr Zelensky llama a sus aliados occidentales a una «acción concreta» contra la escalada militar rusa.
Ucrania y Rusia iniciaron el lunes un nuevo intercambio de prisioneros que tendrá lugar «en varias etapas durante los próximos días», anunció el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky. Esta operación humanitaria ocurre mientras Moscú lanzó un ataque masivo de drones contra Ucrania con un número récord de 479 aeronaves, en represalia por el ataque ucraniano que supuestamente destruyó 41 bombarderos rusos la semana pasada. «Entre los que estamos trayendo de vuelta ahora están los heridos, los gravemente heridos y los menores de 25 años», precisó Zelensky en las redes sociales, destacando la importancia de estos intercambios humanitarios a pesar de la escalada militar continua.