
Los ataques ucranianos provocaron cortes de electricidad en franjas del territorio controlado por Rusia en las regiones de Zaporiyia y Jersón, en el sur de Ucrania, y ha dejado a cientos de miles de personas sin electricidad, dijeron el martes responsables designados por Rusia.
Los responsables dijeron que no había ningún efecto sobre las operaciones en la central nuclear de Zaporiyia, la instalación nuclear más grande de Europa, que fue tomada por Rusia en las semanas después de la invasión de febrero de 2022 de Moscú de Ucrania.
Responsables rusos a cargo de la planta dijeron que los niveles de radiación eran normales en la instalación, que opera en modo de parada y no produce energía en este momento.
Los gobernadores designados por Rusia en las dos regiones —que se encuentran entre las zonas clave que Moscú exige que Ucrania ceda para que termine la guerra— dijeron que los ataques ucranianos llevaron a las autoridades a introducir medidas de emergencia para preservar las fuentes de energía.
Hasta el martes por la mañana, más de 600.000 personas de casi 500 asentamientos de Zaporiyia estaban sin electricidad, después de que los bombardeos de las fuerzas ucranianas dañaran la infraestructura de alto voltaje, escribió en Telegram el gobernador designado por Rusia, Yevgeni Belitski.